Sorprendentemente hoy en día existen negocios que, a pesar de que han estado en el mercado por algunos años, no tienen una idea bien definido de quién es su mercado meta y aunque quizá alguna vez pensaron en este aspecto, ahora es un detalle muy importante del que se han olvidado. Mientras tanto, continúan funcionando aún sin conocer características básicas, demográficas y de comportamiento de sus clientes.
Si por tu parte crees que sabes lo que necesitas de tu mercado meta porque conoces su perfil demográfico, debes saber que este es sólo el principio para conocer a tus clientes, pues además debes estar familiarizado con su personalidad, hábitos y comportamientos para lograr comunicarte y conectar con ellos, creando y transmitiendo mensajes que hagan que se sientan identificados con tu marca.
Conocer a tus clientes no es una tarea tan sencilla como podrías pensar, pero sin duda alguna vale la pena realizarla. Éstos son algunos métodos que en conjunto te darán la información que necesitas acerda de tu mercado meta:
Existen estudios y análisis de mercado, reportes de la industria y casos de estudio que podrían ayudarte a definir y conocer mejor a tu mercado. Cuando te encuentres en búsqueda de este material procura enfocarte y confiar solamente en fuentes relevantes y en las publicaciones más recientes.
Es importante que hagas tus propios estudios de mercado para probar y respaldar tus ideas sobre los hábitos y comportamientos de tu audiencia. Comienza por un estudio cuantitativo que abarque a una porción representativa de tu mercado meta, así podrás obtener estadísticas válidas y generalizar los resultados. Después puedes incluir una fase cualitativa que, aunque se haga con una muestra pequeña, te ayudará a obtener ideas más amplias, detalladas y profundas sobre cómo funciona la mente del mercado al que te diriges.
Éstos son personajes ficticios que representan a una o varias personas promedio de tu mercado meta. Con la información recopilada anteriormente puedes definir detalladamente una o varias “personas” que representen a tus clientes, desde su edad, género, nivel educativo, ingresos, hasta rasgos de su personalidad y comportamiento relevantes para la elección, compra o uso de tu producto o servicio.
Cuando ya has definido bien el perfil de tu mercado meta entonces es momento de ver qué hacen los demás para comunicarse con este target. Para eso puedes analizar la publicidad y los mensajes tanto de la competencia como de productos y servicios de otras industrias que se dirigen al mismo mercado meta que tú, así podrás aprender qué hacen ellos y descubrir elementos diferenciadores.
Las sociedades y las personas se encuentran en constante cambio y evolución por lo que periódicamente debes detenerte a analizar a tu mercado meta para descubrir oportunamente los cambios, adaptarte a ellos, sacarles provecho y adelantarte a la competencia. Por este motivo también es importante que tus estrategias tengan cierta flexibilidad que permita realizar cambios cuando éstos sean necesarios.